Crecimiento de demanda eléctrica tanto en el sector residencial como industrial
EY identifica en su estudio que la situación de transición energética actual está caracterizada por un crecimiento de la demanda eléctrica impulsado principalmente por:
- La transformación del segmento residencial, impulsado por la instalación de bombas de calor de alta eficiencia, especialmente en la nueva vivienda y la expansión del vehículo eléctrico.
- La electrificación de procesos industriales con temperaturas inferiores a 400º C, que puede suponer hasta 129 TWh en 2035.
- El desarrollo de nuevos vectores de demanda, como el hidrógeno verde, los centros de datos, la electrificación de los puertos, las plantas desaladoras y la infraestructura de recarga pública, que podrían sumar más de 170 TWh a 2035.
- El despliegue masivo de generación de electricidad renovable permite reducir los precios de la electricidad y desvincularlo de la volatilidad del gas. El siguiente paso lógico sería utilizar esa electricidad más barata en sectores como el transporte, la industria y los edificios utilizando vehículos eléctricos, bombas de calor para la climatización de los edificios o transformando procesos productivos que consumen combustibles fósiles en la industria.
- Estas tecnologías de electrificación no sólo reducen las emisiones de forma significativa, sino que representan una vía para atraer nuevo tejido industrial y contribuir al desarrollo económico de España.
- Appa Renovables ha publicado el informe “El momento de la Electrificación” en el que plantea a la electrificación como una alternativa más eficiente y económica frente a las soluciones tradicionales. En este sentido defiende que la transición a un hogar electrificado permitiría reducir significativamente el coste energético de los hogares, con un ahorro estimado del 64%, lo que equivale a 1.433 € anuales. Además, los beneficios ambientales son notables: considerando las emisiones actuales del mix eléctrico, un hogar electrificado reduciría las emisiones un 83% en comparación con un hogar tradicional.

Las compañías eléctricas se enfrentan a un volumen creciente de solicitudes de acceso y conexión.
En este escenario, resulta imprescindible desarrollar herramientas que permitan dar una respuesta ágil y eficaz a dichas solicitudes, identificando con precisión las necesidades de conexión y las soluciones técnicas que permitan electrificar esta demanda de forma eficiente sin olvidar la calidad y seguridad de suministro.
Cuantificación del crecimiento de demanda eléctrica
EY estiman que la demanda a 2030 va a aumentar entre un 33% -54% (305,8 –360,5 TWh) con respecto a 2025, en línea con el PNIEC (329,6 TWh). Y en 2035 se incrementará entre el 64% -105% (377,5 –479,5 TWh).
La electrificación de los procesos productivos con temperaturas inferiores a 400º jugará un papel clave en la descarbonización de la industria de aquí a 2030, gracias a la adopción de tecnologías eléctricas más eficientes y sostenibles como las calderas eléctricas, las bombas de calor y el almacenamiento electrotérmico, que irán sustituyendo progresivamente a los sistemas basados en combustibles fósiles.
Al mismo tiempo, en el segmento residencial, la construcción de nuevas viviendas con bombas de calor de alta eficiencia y la creciente penetración del vehículo eléctrico se consolidan como vectores fundamentales que transformarán las necesidades de conexión en el ámbito residencial.
Asimismo, la incorporación de nuevos vectores de demanda como el hidrógeno verde, los centros de datos y la infraestructura de recarga eléctrica supondrá una contribución adicional significativa al sistema eléctrico. Se estima que estos vectores aporten entre 48,7 y 87,5TWh adicionales en 2030 respecto a los 3,5–4,2TWh registrados en 2025. En términos de potencia, ello se traduce en un aumento de entre 16,8 y 33,9GW sobre la base de 2025 (1,6–2,8GW).
Inversiones en redes eléctricas asociadas al crecimiento de demanda
El aumento de la demanda eléctrica se ve impactado especialmente por la conexión de nuevos consumos como centros de datos, electrolizadores o la electrificación de procesos industriales. Esta tendencia está desplazando las inversiones hacia niveles de tensión superiores, en contraste con el patrón histórico centrado en baja tensión.
El estudio modela dos escenarios de demanda eléctrica:
- Un escario ambicioso en el que se mantiene los escenarios PNIEC para H2, vehículo eléctrico y Autoconsumo y maximiza el potencial de electrificación del sector Industrial (Escenario A).
- Escenario más conservador en todos los vectores de demanda, manteniendo el objetivo del PNIEC en reducción de emisiones en el sector Industrial (Escenario B).
En el escenario de electrificación más conservador las necesidades de inversión derivadas del crecimiento de la demanda, la digitalización y la reposición de activos a 2030 podrían ser compatibles con el planteamiento de ampliación de los límites establecidos en el proyecto de Real Decreto por el que se regulan los planes de inversión de las redes de transporte y distribución de energía eléctrica.

Recomendaciones
- Este estudio pone de relieve la necesidad de políticas públicas, inversiones y marcos regulatorios que impulsen la descarbonización y garanticen una infraestructura adecuada para absorber el crecimiento proyectado de la demanda eléctrica nacional.
- El proyecto de Real Decreto del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico por el que se regulan los planes de inversión de las redes electricas incluye un incremento excepcional del 62 % en los límites de inversión asociados al PIB principalmente para inversiones anticipatorias y electrificación de la demanda (industria, transporte y vivienda).
- El escenario más conservador de prevision de demanda y de inversión en redes podría ser compatible con esta propuesta de Real Decreto. Cualquier inversión inferior no sería suficiente para dar combertura al crecimiento de demanda que necesita España.









